El tema que me gustaría tratar hoy es una herramienta que nos puede ayudar a la hora de nuestra práctica. Estoy refiriéndome a llevar un Diario de Danza. Tanto si trabajas sola, como si vas a clases, es muy recomendable tener a mano un cuaderno en el que vayamos anotando como ha ido ese ensayo. Las ventajas que este diario nos aporta es tener claro lo que hemos repasado ese día, que problemas o dudas nos hemos encontrado, que ejercicios o movimientos nos cuestan más... para después de este análisis poder trabajar aquello que hemos detectado que no sale del todo bien y hacer un ensayo más eficaz. Si vamos a clases, nos ayudará a tener claro lo que debemos preguntar a nuestra profesora.
Os cuento como lo hago yo y luego cada una puede adaptarlo a sus preferencias o necesidades. Suelo escribir en este cuaderno al finalizar una práctica en casa o al llegar de una clase o curso.
Lo primero que anoto es la fecha, por supuesto. Luego empiezo a hacer un esquema de la clase: calentamiento, movimientos, coreografía y estiramiento. Aquí cada una deberá usar el esquema que haya dado.
En el calentamiento anoto si me he encontrado con alguna resistencia muscular, si he necesitado más tiempo del habitual, si por el contrario ha sido poco... Si introduzco algún elemento nuevo en el calentamiento, observo y anoto como ha sentado ese nuevo elemento a mi rutina. Todo esto me sirve para corregir al día siguiente lo que ha fallado y mejorar el ensayo.
En la parte de movimientos anoto en primer lugar lo que he practicado ese día (ochos, desplazamientos, hip drop...) y pongo comentarios sobre los problemas con los que me he encontrado, las cosas que me han sido más fáciles y sobre posibles soluciones y trabajo adicional. Si tengo alguna duda que resolver también la anoto.
Algo similar hago con la coreografía. Si encuentro algún paso que en la coreografía no sale del todo, lo anoto para limpiar al día siguiente.
Y por último en el estiramiento analizo que partes de mi cuerpo necesitan más, que zonas están muy tensas o doloridas, para poder corregirlo y también tenerlo en cuenta para no sobrecargar esas zonas.
Todo esto no suele llevar más de veinte minutos y realmente establece una diferencia entre ensayar sin ese diario y hacerlo con él. Además esto nos obliga a estar plenamente conscientes cuando estamos en una clase, o cuando practicamos por nuestra cuenta y también nos ayuda a hacer un análisis de como responde nuestro cuerpo y como podemos ayudarlo a mejorar sin lesionarnos.
Espero que lo prueben y verán que diferencia.
2 comentarios:
¡Muy buena recomendación! Yo intentaré hacerlo justo después de clase, en el metro, porque como espere a llegar a casa se me ha olvidado la mitad :D
A mi me pasa igual, tengo que escribirlo cuando justo cuando termino o nada más llegar, pero me ha ido muy bien. Un saludo! ;)
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